Después del boom del ecommerce, los compradores vuelven a llenar las calles para darle a la tienda física el valor añadido que todas las marcas quieren. Ubicaciones prime, espacios más grandes para facilitar la distribución y un extra que va más allá de la pantalla.

Cualquier día, a cualquier hora, las principales arterias comerciales de Bilbao están hasta arriba de locales y turistas que pasean o están de compras. Las restricciones han terminado y eso se nota en el comercio.

En 2022 el crecimiento de las ventas físicas se ha intensificado frente a las compras online. El impulso del comercio electrónico ha llevado
necesariamente a acelerar la adaptación de las tiendas y espacios físicos hacia un tipo de experiencia onmicanal, pero también cada vez más los operadores online apuestan por la tienda física. Así, se refuerza la demanda de locales físicos, pero también la demanda de locales físicos de mayor superficie con el objetivo de dedicar parte de la tienda a almacén y reducir costes de distribución.

¿Qué pasa con el ecommerce?

Desde el inicio de la pandemia y tras el cierre de los establecimientos físicos, el auge de las compras online se aceleró en todo el mundo. El confinamiento y las restricciones sanitarias provocaron este acelerón que aunque se mantiene, ha bajado el ritmo y la intensidad, dejando a las tiendas físicas recuperar su posición.

Con la recuperación del sector turístico, que se consolida con cifras casi récord registradas antes de la pandemia y con el regreso continuado de los clientes a las tiendas, el crecimiento de las ventas físicas se ha intensificado frente a las compras online.

Los operadores online apuestan cada vez más por la tienda física

La ventaja de vender productos online y offline ofrece a los retailers más flexibilidad y capacidad de adaptación a los cambios en la demanda de los consumidores y a acontecimientos relevantes, como puede ser una pandemia o una recesión económica. Por ello, cada vez más operadores online están recurriendo a los espacios físicos, imitando a los retailers omnicanal, que siguen mostrando buenos resultados.

Esto hace que la demanda de locales comerciales físicos aumente, ya que el espacio físico contribuye a un modelo de negocio más rentable y flexible (y también es potencialmente una práctica más sostenible).

Otra tendencia notable es la apuesta por superficies prime más amplias, con el objetivo de dedicar parte de la tienda a almacén y así reducir sus costes de distribución. Parte de esa estrategia omnicanal pasa por ahorrar esa última milla con sistemas click&collect y similares.

Tiendas efímeras o pop ups

Otra alternativa que sigue suscitando un gran interés entre las marcas nativas digitales es la tienda efímera o pop-up. Así, marcas como Wallapop o Shein han abierto sus primeras tiendas físicas con formato popup durante 2022.

Datos del informe La tienda física como palanca de valor para el negocio